Casa Soyer: haz que tu espacio cuente tu historia

¿Por qué elegirnos? Conoce los principios, la inspiración y las características detrás de nuestras marcas y piezas, y descubre por qué no encontrarás una propuesta igual en Lima.

El estilismo o styling cobra cada vez mayor importancia en los proyectos de interiorismo. Es la cereza que corona el pastel, la pincelada final que ayuda a elevar el acabado de un espacio. Un ambiente amplio, luminoso y ventilado, con una disposición correcta, pero una asesoría inadecuada, puede hacer la diferencia en términos de bienestar. 

¿Un jarrón puede hacerme una persona más feliz? No literalmente, pero sí puede hacer que sientas comodidad y gozo en el espacio que habitas. Y eso, claro que sí, puede aportar significativamente a tu felicidad. Esa es la misión de Casa Soyer: hacer que tu sitio refleje tu mejor versión y, al mismo tiempo, que la potencie.

Originales y singulares

Como cada uno de nuestros clientes es único, queremos que nuestros productos también lo sean. Buscamos piezas en las que prime la originalidad y un diseño potente. En palabras de nuestra curadora y experta en diseño interior, Ana Teresa Vega Soyer:

“Cada elemento tiene que narrar una historia, tiene que significar algo para la persona que lo adquiere, ya que va a formar parte de su familia, de su casa”

Además, desde su perspectiva como diseñadora industrial, Ana Teresa siente un profundo respeto por el trabajo de sus colegas. Es por eso que busca objetos originales, irreproducibles a gran escala. Además de la autoría, lo piensa también en términos de la materialidad y calidad. En Casa Soyer, más que en “decoración”, pensamos en arte.

Ahora bien, aun cuando todo tiene que ser artístico y tener calidad, Casa Soyer ofrece objetos de valor estético y funcional a un precio justo y transparente, alineado con el que se encuentra en las tiendas originales.

 

 El porqué de nuestra esencia

En su carrera como interiorista, muchas veces, Ana Teresa llegaba a la etapa final de sus proyectos con el avance y ritmo esperados. Pero entonces, de pronto, el proceso se estancaba. Podía recorrer galerías enteras escudriñando pieza por pieza, sin que el cliente hallara algo con qué identificarse. 

“Podía demorar días, semanas, meses, y el proyecto no se terminaba de resolver”, recuerda. Y fue entonces que se dio cuenta de que el mercado local tenía una carencia: un espacio en el cual encontrar objetos de diseño cien por ciento originales, sofisticados y con personalidad propia.

Es por eso que para construir el catálogo Soyer, Ana Teresa realiza un minucioso trabajo como curadora:

1. Su primer acercamiento lo hace desde una mirada técnica profesional. ¿Dónde está el valor agregado del producto? ¿Es único? ¿Es original? ¿No se parece a nada que se pueda encontrar en otras tiendas locales? ¿Es irreproducible en términos de calidad y acabado? Si todas las respuestas son afirmativas, entonces se pasa al siguiente filtro.

2. El segundo factor decisivo es el contenido. Un objeto de Casa Soyer debe saber contar una historia. Puede ser algo sobre su procedencia, quizás un recuerdo o un significado abstracto relacionado con quien lo elige. El precio no lo define. Tanto un objeto de dos cifras, como uno con algunos ceros extra por detrás pueden producir el mismo impacto visual, el mismo deleite en la contemplación. Para nuestra especialista, lo más importante no es que ostente, sino que signifique.

“No se trata de comprar un florero simplemente para ponerle una planta adentro; sino que este, con o sin planta, me produzca cosquillas cuando lo veo, porque, finalmente, es un objeto de arte”, cuenta. Cada uno tiene que despertar una emoción, sin importar su valor comercial. 

Es por esto que el rango de precios dentro del catálogo Soyer es amplio. Su principal elemento común es la potencia del diseño. Es bajo esta premisa que se seleccionaron primero las marcas, y luego los productos en singular. 

La fórmula de Casa Soyer equilibra presupuestos; ayuda a crear ritmos y contrastes, y permite ensamblar una variedad de composiciones únicas. La selección, curaduría y combinación de los componentes pueden generar un abanico de identidades propias y muy peculiares. 

Con el tiempo y la experiencia, Ana Teresa ha aprendido a reconocer el estilo y las preferencias de sus diferentes tipos de clientes.  Es un análisis que requiere mucha cabeza, pero también corazón.

Es por esto que nuestras marcas reflejan personalidad y un estilo de vida centrado en lo artístico y lo personal. Algunos ejemplos de esto son las seductoras piezas de mobiliario y accesorios Pulpo, con su aire vanguardista y chic; o también las sofisticadas luminarias de la marca checa Brokis, que destacan por la exquisitez de sus detalles y su tributo a la técnica bohemia del vidrio soplado; y, por supuesto, la delicadeza y lujo de las alfombras Amini, de tradición afgana combinada con lo mejor del diseño italiano.

Las piezas de Casa Soyer poseen una valoración estética de nuestra curadora, pero también se distinguen por su funcionalidad. Una lámpara de mesa o de pie, un florero o una manta siempre van a embellecer un ambiente, pero son más que accesorios: sirven al confort y a las necesidades cuando realmente se habita un espacio. Por eso, al entrar en nuestro universo encontrarás estímulo para los ojos y mucho criterio para la practicidad. Solo así, el proceso de decidir cómo configurar cada rincón de tu casa será placentero.