5 RAZONES POR LAS QUE AMAMOS LAS SILLAS DE DISEÑO

Si todavía no te decides a llevar esa hermosura de silla con la que sientes mariposas en el estómago, te damos buenos motivos para que no lo pienses más.

Calidad, sofisticación, autenticidad, originalidad, atemporalidad, incremento de su valor en el tiempo… hay potentes argumentos para considerar elegir piezas tan nucleares en todo hogar, como las sillas, hechas por diseñadores. 

En ocasiones, la potencia visual o el precio parecen ser motivos en contra de una adquisición de este tipo; pero puestos en contexto, se puede concluir que, muchas veces, una silla de diseño es justo lo que necesitamos. Te invitamos a descubrir si este es tu caso.

• Siempre serán un tema de conversación

Los muebles y objetos decorativos de diseño destacan por sus siluetas y siempre saben, de una forma u otra, llamar la atención. Claro que esto no significa que deban ser estridentes, necesariamente, o que resten protagonismo a los demás elementos de un ambiente. Pero ocupan su lugar, y sí que saben dárselo.

Por eso, cuando elegimos una silla de diseño, sabemos que lo hacemos porque queremos tener una pieza que dé de qué hablar. Cada una tiene su propia historia, ya sea mítica, inspiracional o en torno a su fabricación, y conocerla siempre es un placer. Compartirla, aún más.

Todo esto, sin contar los relatos que se tejerán en torno a su presencia en nuestro hogar…

• Son un manifiesto de tu estilo personal

Los verdaderos amantes del diseño saben que los elementos que se exhiben en una casa dicen muchísimo de quien la habita. No necesariamente eso significa que cada una de las piezas que tenemos deba ser algo único e irreproducible; eso sería como gritar algo en vez de anunciarlo delicadamente.

Ahora bien, la mayoría de las veces resulta por lo menos complicado encontrar algo hecho de forma industrial que se adapte verdaderamente a nuestra personalidad y estilo de vida. Los muebles de diseño, al ser concebidos para ser funcionales y, al mismo tiempo, poseer una estética excepcional, tienen una narrativa propia, que puede ser mucho más compatible con quienes somos.

 

• Son objetos creados para durar por siempre

Mientras que un objeto producido de forma masiva está pensado con la finalidad de ser renovado más pronto que tarde, uno de diseño procura vivir mucho más tiempo. Por eso, los conocedores entienden que una silla de diseño es más que una simple compra, una inversión.

La calidad es un factor determinante. Ten presente que los fabricantes detrás de este tipo de mobiliario pasan años y, quizás, décadas perfeccionando sus técnicas y procesos para hacerlos óptimos. Así que considera la elección de tus sillas de diseñador como un matrimonio feliz y duradero.

• Su diseño sobrevive a cualquier tendencia

Claro que nos encantan las modas. Sin embargo, cuando se trata de elementos tan personales como las piezas de mobiliario, a veces es mejor optar por algo distinto: un diseño verdaderamente atemporal.

A partir de una pieza central que siempre será bella, sin importar en qué año la mires, puedes incorporar otros componentes de tendencia que acompañen. Recuerda: lo principal es expresarte, tal y como eres, en el lugar que ocupas.

• Imprimen sofisticación y elegancia a cualquier espacio

Además de hacer que tu hogar sea único e inigualable y de ganar valor en el tiempo, las sillas de diseño añadirán un indiscutible aire chic a tus espacios. Cambiar las formas clásicas y más convencionales por otras hechas con un gusto refinado realza todo el conjunto del diseño interior de los ambientes.

El diseño debe hacer que algo sea útil y funcional, que su practicidad sea indiscutible; pero también que la simple contemplación del objeto nos emocione, conmueva y brinde alegría. ¿Eso sientes cuando ves esa silla? Si la respuesta es afirmativa, entonces ella ya te eligió a ti.